Y es que cuando tenemos niebla persistente en Pamplona, basta con coger el coche unos 20 minuticos y te sales por encima de las nubes, entre los molinos del parque eólico, para gozar de un espectáculo al que nunca te acostumbras y que es el que os voy a mostrar hoy.
Por la mañana ya había estado yo por esas alturas porque no sabía que la niebla iba a persistir hasta la tarde. Tenía poco tiempo y sólo hice unas pocas fotos.
Hacia los Pirineos, con el Ori dominando el paisaje.
Hacia el Cabezón de Echauri y San Donato.
El camino que recorre el cordal entre los gigantescos molinos.
El fondo blanco de las nubes se presta a bonitas tomas como ésta.
En seguida me bajo porque tengo que ir a trabajar. Por abajo el panorama es muy distinto... un "aburrido" día gris de niebla.
Y como al recoger a las peques a la tarde veo que la niebla persiste, decido que es un buen plan ver atardecer "al solecito" y no "a la sombra"... Así que vamos para arriba... y así está el panorama.
Éstas se lo pasan pipa con cualquier cosa...
El Pirineo Aragonés asoma.
La Trinidad de Irurzun.
Cabezón de Echauri y San Donato.
La inconfundible silueta del Elke y el Pausarán.
San Cristóbal con su fuerte. Lo de atrás supongo que será el Sayoa y el Okolín.
El Moncayo, 200 km al sur...
Las nubes parecen olas que embaten con fuerza sobre los molinos.
Y hacia el otro lado parece la inmensidad del mar en calma...
... con sus costas y playas...
... y con sus islotes.
Éstos se mantienen "a flote".
Una de las muchas bandadas de grullas que hemos visto pasar en estos días entre El Perdón y la Sierra de Alaiz nos saluda...
Pero las peques tienen poca autonomía y se aburren ya de su papi con las fotos, así que bajamos al coche y continúo por la carretera hasta la ermita del Perdón para hacer tiempo hasta la puesta de sol...
... que aunque poco, aún le queda un rato.
Desde la ermita el panoráma es espléndido hacia los pirineos. Además, se ve la imponente sombra de la sierra sobre el mar de nubes... Precioso.
Peña Izaga y la Higa de Monreal, como dos inmensos buques.
El Ori, donde estuve el otro día haciendo fotos del otoño.
Pirineos desde el Anie hasta Collarada, un panorama imponente.
Collarada (que aún la tengo pendiente) y la Pala de Ip.
Nos despedimos de estas vistas y volvemos al otro lado para ver al sol hundirse en el mar de nubes.
El panorama ha cambiado mucho cuando salimos de nuevo a la otra vertiente. Tiene unos colores impresionantes!
Se ve sobresalir la ermita de San Martín de Añorbe entre las nubes...
Y ya vemos que el que se va a comer el sol es Montejurra, y no directamente el mar de nubes, pero bueno, no está nada mal el panorama de la puesta de sol.
Las últimas luces doradas bañan el monte Monjardín...
... y todo el parque eólico.
Por fin, a toda velocidad el sol se pira a dormir y nos quedamos un rato viendo cómo van cambiando los colores del cielo.
Hacia poniente...
... y hacia oriente.
Como empieza a refrescar emprendemos el regreso, pero no puedo evitar parar un poco en el monumento al peregrino.
Y la mayor también quiere salir "a tocar" las estatuas... La otra hace un rato que emprendió un viaje astral...
No somos los únicos que andamos por aquí fotografiando el atardecer...
Y no me extraña, con el panorama que hay...
Pero ya se hace tarde y nos tenemos que sumergir de nuevo en las nubes para ir a casa a cenar y dormir, que mañana empieza otro día... Eso sí, hoy nos llevamos a la cama un precioso banco de imágenes que será difícil olvidar.
Hasta la próxima.
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