Cimas: Borrokosko (1406 m.) y Areta o Arnazu (1367 m.).
Punto de Partida: Elcoaz (Urraul Alto, Navarra).
Tipo de ruta: Circular.
Desnivel aproximado acumulado: 800 m.
Tiempo aproximado sin paradas: 4 h. 30 min.
- De Elcoaz a El Pontarrón: 25 min.
- De El Pontarrón al cruce con el camino que empieza a subir: 30 min.
- Del principio del camino de subida a los pastos: 45 min.
- De los pastos a la cima de Borrokosko: 15 min.
- De Borrokosko a Areta: 30 min.
- De Areta a los Llanos de Areta: 20 min.
- De los llanos de Areta a la Borda de Borrokosko: 45 min.
- De la Borda de Borrokosko al Pontarrón: 30 min.
- Del Pontarrón a Elcoaz: 25 min.
Otras observaciones: El tramo de bajada desde los Llanos de Areta es bastante sencillo, pero si no prestas atención a los hitos puedes tomar una senda equivocada, por lo que se ha de ir muy pendiente.
Nuestra excursión de este miércoles ha discurrido por la solitaria y poco conocida Sierra de Areta o Montes de Areta, sita entre los valles del río Irati y el río Salazar, en el pirineo navarro. A pesar de que es una zona poco visitada por los montañeros, para mí es de una belleza salvaje: sus bosques, regatas, paredes de roca que salen verticales de la montaña como huesos milenarios… Todo me atrae bastante. La cima más conocida es su techo, el Baigura (1474 m.), pero hacia su parte oriental está el bonito valle del río Areta con las cumbres que lo rodean. Es a esta zona hacia la que nos hemos dirigido en esta ocasión para ascender dos cimas: Borrokosko (1406 m.) y Areta (1367 m.).
Éste es el mapa dle recorrido que hicimos:
Ésta es la tercera vez que venimos a estos montes. Las dos ocasiones anteriores hemos visitado:
- El Baigura (en ruta circular desde Azparren).
- Arizgaña y Erremendia (en ruta circular desde Ayechu).
En esta tercera ocasión realizaremos otra ruta circular desde el pequeño pueblo de Elcoaz, en el Valle de Urraul Alto.
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A pesar de lo pequeño del pueblo, tiene algún caserón bastante impresionante.
Empezamos nuestro recorrido en la parte alta del pueblo. Hemos de tomar una pista hormigonada que conduce al pueblito de Aristu.
La pista comienza bajando y en seguida aparece ante nosotros todo el recorrido que vamos a hacer hoy.
A los 10 minutos de camino, junto a una pequeña alameda, surge otra pista a nuestra derecha, ésta de tierra, que vadea en seguida la regata de Sandoain, que baja desde Aristu. Cruzamos por ella.
Hay un precario puente de troncos para pasar, pero yo prefiero cruzar por la piedras del arroyo, que me parecen más fiables…
Continuamos por esta pista de tierra y a los pocos minutos encontramos una desviación a la izquierda. Haremos caso omiso de la misma, pues se trata de un camino que asciende por la loma del monte hacia las Peñas de Sandoain y Oskioz que tenemos justo enfrente. Ese camino comunica en su parte alta con la Cañada de los Salacencos (por donde bajaremos) que desciende de los Llanos de Areta hacia Aristu, pero no es ese el itinerario que traemos pensado, así que seguimos de frente.
Por fin, tras 25 minutos desde Elcoaz, llegamos a uno de los sitios que más interés tenía yo en ver. Se trata de un estrecho paso entre rocas por donde desciende en cascadas el joven río Areta. Se denomina: El Pontarrón.
La pista lo cruza y da un giro a la derecha. Continuamos siempre por la misma pista sin desviarnos. En seguida, si miramos atrás, tenemos esta impresionante vista de la Peña de Oskioz.
A los pocos minutos llegamos a un punto importante del recorrido. Hemos de vadear un arroyo que desciende a nuestra izquierda y que baja de los Llanos de Areta. Nada más cruzarlo veremos que a la izquierda empieza a trepar una senda marcada con hitos. Por aquí es por donde volveremos y nos interesaba tener localizado el lugar en que salía la senda, pues no sabíamos si iba a ser muy clara. Por ahora seguimos recto pero sin olvidar a qué lado del arroyo sale la senda.
Este tramo que sigue no tiene pérdida. Hemos de seguir siempre por la misma pista, ancha y clara. Está bastante embarrada en algunos tramos, pero como hay muchas hojas, en general, se avanza sin problemas. Eso sí, tendremos que vadear más de una vez el río Areta, pues la pista lo cruza una y otra vez.
El lugar es alucinante. Un bosque bastante espeso de árboles mezclados. Todo verde, llenos de musgos y helechos.
Aparte pudimos comprobar la sensación de la inversión térmica, pues pasábamos en algunas ocasiones de un aire glacial a unas corrientes de aire caliente que llamaban mucho la atención.
Incluso aprovechamos para hacer alguna chorradilla con las lianas que abundan en el bosque…
Según vamos remontando el río, en suave pendiente, va apareciendo a nuestra derecha la impresionante cara norte de la Peña Azarte (1079 m.), que habrá que visitar en alguna ocasión... No deja de asombrarme este paredón de roca que surge aquí de pronto…
Así, tras una media hora de agradable paseo desde el Pontarrón, llegamos a un cruce de caminos. A nuestra derecha nace un camino que vadea el río Areta y empieza a trepar por la ladera contraria. Por él comunicaríamos con el camino que lleva a Arizgaña, aunque también podríamos subir a la Peña Azarte o bajar a Ayechu.
Pocos metros más adelante tenemos el desvío que nos interesa a nosotros, a la izquierda, que empieza a trepar sin piedad hacia la cima del Borrokosko.
En los primeros metros, la cara norte de la Peña Azarte atrae toda nuestra atención.
Una vez que hemos ganado más altura, podemos ver también las Peñas de Lareki, cercanas a Azparren. Alla abajo ha quedado ya la Peña de Oskioz que veíamos al salir del pueblo.
En el horizonte, detrás de la Peña Azarte, se recortan las conocidas siluetas de Izaga y la Higa de Monreal.
El camino va subiendo haciendo distintas lazadas. A tramos es muy empinado y en otras ocasiones nos da un pequeño respiro. Si miramos hacia el este empezaremos a ver las lomas de Arizgaña y Borrotxulo, por donde andamos hace unos meses...
Poco después reaparece Elcoaz allá abajo. Ganamos altura rápidamente...
Tras 45 minutos subiendo por este camino, sin hacer caso a otras sendas que salen en algunos puntos, desembocamos en una zona de pastos. Ya tenemos la cima del Borrokosko al alcance de la mano.
En la parte superior del prado, tras una hilera de grandes bojes, discurre la amplia pista que, desde Ayechu y a través del Collado de Elcoaz llega hasta aquí. Es la pista que tomamos la última vez que estuvimos aquí para subir al Erremendia y bajar luego a Ayechu.
Debemos atravesar el prado, cruzar la pista y subir por el borde de otro pequeño claro que hay más arriba.
Un vistazo a lo que hemos dejado atrás...
Buscamos el paso entre los bojes...
... y salimos a la pista que viene de Ayechu.
Nos desviamos a la derecha subiendo por el otro prado hacia su parte superior derecha.
Las ovejicas que pastaban tan tranquilas se quedan mirando a estos dos pirados que van a subir esta cima perdida...
En la parte superior del prado vemos alguna senda de ganado por la que nos internamos entre el boj para subir a la loma del Borrokosko.
A veces está un poco más cerrado, pero se puede subir sin mayor problema.
El esfuerzo merece la pena, pues cuando llegamos a lo alto de la loma, que está cubierta de hierba, nos encontramos de frente esta espléndida panorámica del pirineo navarro.
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A la izquierda, Abaurrea Alta, el pueblo más alto de Navarra, con los paredones de Berrendi detrás.
A nuestra derecha tenemos la cima, que se encuentra cubierta de hayas por lo que no tiene apenas ninguna vista. Ahora iremos hacia ella.
Y esto es lo que encontramos en la cima, simplemente un hito de piedras que indica el lugar más alto. Unas 2 h. desde Elcoaz (sin paradas… nosotros paramos mucho a hacer fotos…).
Mientras volvemos a bajar al prado de la loma, tenemos esta vista de Elcoaz y de las praderas a las que hemos salido cuando subíamos.
De nuevo en el prado de la loma cimera nos entretenemos en sacar algunas vistas.
La Sierra de Abodi y Berrendi.
Peña Izaga y la Higa de Monreal.
El Pirineo Navarro.
Petrechema, Sobarcal y Acherito. Curiosa la perspectiva de la pequeña aguja y del Sobarcal. Parecen picos gemelos... En medio del collado de Petrechema se ve algo que no sé si será el pico de Ger.
La Mesa de los Tres Reyes.
El coloso Anie.
A nuestros pies se extiende un hermoso hayedo…
Hacia el otro lado se aprecia la Peña Oroel.
Ahora continuamos nuestro recorrido por la loma del Borrokosko en dirección oeste, para salir de nuevo a la pista que hemos cruzado antes de subir a la cima. Hay un camino muy claro y ancho que discurre un poco por la izquierda de la loma.
El camino cruza una escalerilla (como se nota que Juan Luis está posando...) y luego continúa entre los bojes.
Salimos en seguida a la pista y giramos a la derecha, para llegar al collado herboso que separa Borrokosko de la cima de Areta. Se trata de un rincón precioso.
Al llegar al collado ya vemos a nuestra izquierda claramente la cima de Areta. Subiremos entre el boj (que no está muy cerrado), al principio, y por un hayedo bastante despejado hasta el final. No hay camino fijo, así que iremos buscando los pasos más despejados. No tiene pérdida.
Cima de Areta (1367 m.), también denominado Arnazu en algunos mapas. En lo más alto de la cima tenemos esta curiosa lápida.
No hay muchas vistas más que hacia el sur. Os dejo algunas fotos del paraje que, a pesar de no tener vistas, es muy agradable.
Entre las ramas vemos la cima del Borrokosko, donde hemos estado hace un ratico.
Aquí comemos y descansamos, resguardados tras la gran roca de la cima, pues el tiempo está cambiando. Llega el frente anunciado y se está nublando y sopla un viento cada vez más frío.
Después de comer nos hacemos alguna foto y empezamos el descenso.
Ahora bajaremos siguiendo la loma de la montaña en dirección suroeste, sin tirar hacia ninguna de las dos laderas. Pasamos al lado de algunas palomeras y continuamos bajando, siempre por la divisoria, hasta penetrar en un bonito hayedo donde nos cruzamos con el camino que hemos de tomar ahora.
Mientras bajamos tenemos bonitas vistas de Abaurrea Alta y la Sierra de Abodi.
Y frente a nosotros contemplamos la mole del Motxorro y el collado que lo separa del Baigura.
Tras una corta bajada de unos 15 minutos desde la cima, salimos al camino que queríamos llegar, y lo tomamos hacia la derecha. Este camino nos baja directamente a los Llanos de Areta, una amplia zona de prados a la que se puede llegar en coche (aquí encontramos varios todoterrenos) por la pista que veníamos desde Ayechu o desde Abaurrea Alta, donde termina la pista.
Una vez en los Llanos de Areta giraremos a la izquierda para buscar la bajada junto a la regata. Este tramo era el que tenía menos claro de la ruta, pues al prepararla no había encontrado ninguna reseña clara, pero cuál es nuestra sorpresa al encontrar aquí nada menos que marcas de GR.
Seguimos las marcas y vemos además algún poste señalizador que indica Ruta de los Salacencos. Posteriormente me enteré de que se trata de una antigua cañada que está casi en desuso. Sea como sea el camino es amplio y seguro, y baja llevando el arroyo a la izquierda.
Iremos muy pendientes de no perder las señales, pues el principio está bastante invadido de hojas y a veces se puede confundir.
Pero pronto pasa a ser un amplio camino empedrado. Este tramo será uno de los más bonitos del día, por un bosque muy agradable.
En algunos tramos tenemos unas amplias vistas a la izquierda, y vemos, ahora a la luz del sol, que aún quedan unos colores otoñales muy bonitos en estos bosques.
Y ahora llegamos a uno de los puntos más importantes de la excursión. Nuestro camino desciende haciendo unas eses en un tramo más empinado, y abajo, muy cerca del arroyo (ahora sin agua), hace una última curva hacia la derecha (en rojo). Aquí aparecen unos hitos y debemos dejar la cañada, que nos llevaría a Aristu alargando demasiado la excursión. Hemos de cruzar el cauce del arroyo y avanzar por la senda que arranca en este punto, siempre marcada con hitos (en azul).
El camino empieza a descender hacia el sur y un poco hacia el este, para girar después hacia el suroeste llevándonos directamente (a través de una zona bastante pelada de tierra y piedrecitas descompuestas) a las ruinas de la Borda de Borrokosko. Hemos de fijarnos siempre en los hitos que marcan todo el camino.
Estas ruinas se encuentran en un lugar muy bonito. Una praderica verde con el Motxorro presidiendo las vistas hacia el oeste.
[Ver en tamaño más grande]
A nuestros pies Elcoaz, cada vez más cerca.
El camino nos llevaba a una fuente que hay junto a la borda (no hace falta salir al prado) y aquí giramos a la izquierda, por donde continúa, después de refrescarnos.
Éste es el otro punto importante de la excursión. El camino sigue llaneando y a los pocos metros hay un desvío a la derecha. No estaba marcado y cuando nos dimos cuenta ya habíamos avanzado un rato siguiendo de frente. Colocamos un hito para que no se pase el desvío.
Este camino ya nos llevará directamente a la pista de abajo, por donde pasamos a la mañana, pero hemos de ir muy pendientes de los hitos pues en algunos puntos está un poco difuso. Las vistas mientras bajamos son preciosas.
Empieza a atardecer aunque apenas son las 4 de la tarde y el cielo se anaranja por detrás de la Peña Izaga, que empieza a esconderse de nuestra vista.
El camino continúa descendiendo con algunos zigzagues. Pronto penetra en un bonito bosque de robles.
Y después de 25 minutos desde las ruinas de la borda, nos deja junto a un caudaloso arroyo. Ya estamos a pocos metros de la pista de abajo. Hemos de seguir los hitos y alguna marca de plástico en las ramas de los árboles. Aquí aprovechamos el trípode y la poca luz que hay ya para hacer fotos de agua sedosa, que llevamos tiempo queriendo conseguir alguna buena...
Y siguiendo las marcas de plástico llegamos en pocos minutos a la pista de la mañana.
Juan Luis dudaba que lo consiguiéramos (que poco se fía de mí, tampoco le he perdido tantas veces...) y se alegra mucho al ver el hito de por la mañana... Ya estamos en la pista de Elcoaz.
De nuevo en el Pontarrón. Vamos ya despreocupados y sacamos de nuevo el trípode…
Y algunas vistas atrás de la zona que hoy hemos conocido.
A las 17,15 h. llegamos al coche. Ha sido una vuelta muy bonita y hemos disfrutado como enanos.
Fenomenal pareja, el encanto de la Navarra salvaje. ¿No visteis alguna alimaña? Parece una buena zona para corzos y zorros. Una gozada de excursión, tenemos el mismo gusto Gonzalo para estas cimas solitarias, modestas, pero sumamente gozosas. Lo del Pic de Ger es imposible saber (haría falta más zoom), pero me da que no puede ser. Más me inclino por el Sesques...
ResponderEliminarUn reportaje espectacular, perfectamente explicado. Enhorabuena.
Dices que has perdido pocas veces a J.L.... ¡no sé yo qué decir!. Me han gustado mucho los troncos de los árboles totalmente forrados.
ResponderEliminarVaya chulada de ruta y que bien contada!!!... el que se pierda con estas explicaciones pa encerrarlo, ja, ja, ja... Los zoom hacia Petrechema brutales!!!... Gracias por contárnoslo!!!... Saludos Esgalleros!!!
ResponderEliminarGracias a los tres por los comentarios:
ResponderEliminarMikel: Ya te digo que me encantan esas cimas solitarias. Me hacen imaginar un poco cómo serían antiguamente los montes, cuando eran menos explotados...
Lo del pico nevado decía el Ger porque pinté una recta en google maps desde la cima esta hasta el collado de Petrechema y al prolongarla caía por aquella zona... pero en fin, cualquiera sabe.
Migel Ángel: pues cuando vengáis otra vez por aquí podemos ir a muchos sitios donde los troncos están completamente forrados... y tranquilo, hay sitios donde no puedo perder ni a J.L., jejeje!
Vidal: La verdad es que cuando busco rutas para ir a un sitio poco conocido o complicado siempre agradezco las explicaciones detalladas... así que hago lo mismo. Algo que me encanta de estas cimas son las vistas que tienen hacia pirineos... y con algo de zoom, upes mejor, jejeje.
Saludos!
HOLA GONZALO, BUENAS TOMAS LAS DEL HAYEDO Y CASCADAS
ResponderEliminarSALUT
JOAN