Cimas:
Punto de Partida:
Tipo de ruta:
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Otras observaciones:
El jueves 27 de noviembre, aprovechamos que era el último día que daban buen tiempo por mucho tiempo para ir al Pirineo a probar unas raquetas que nos habían dejado.
Salimos hacia la zona del Portalet (frontera con Francia por la carretera de Formigal, en el valle de Tena).
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Poco antes de llegar ya estaba todo lleno de nieve y sacamos alguna vista como esta de Sallent de Gállego junto al Embalse de Lanuza y con la Peña Foratata (2341 m.) al fondo.
Había preciosas estampas invernales como la de estos árboles solitarios...
Un poco más arriba teníamos esta vista de Formigal, con la Peña Foratata por detrás.
Respecto a esta zona y al nombre de Formigal existe una curiosa leyenda que contaré aquí someramente.
Formigal se deriva de la palabra latina formica, es decir, hormiga. Así pues, formigal en aragonés querría decir hormiguero. El nombre parece describir la abundancia de hormigas blancas que existía en la zona. Sin embrago, hoy en día no queda ninguna. El hecho de que la Peña Foratata (foratata es horadada, agujereada) tenga un ojal natural en las inmediaciones de su cresta culminante (de donde se deriva el nombre) que parece dar paso a las entrañas de la tierra ha contribuído a la formación de esta leyenda, en la que las cumbres del pirineo son los dioses protagonistas.Otros de los picos que contemplábamos de cerca eran el inmenso Garmo Negro (3051 m.) y los cercanos Picos del Infierno (3082 m.). Supongo que también tendrán su leyenda, pero no la conozco.
Los dioses Anayet y Arafita eran de los más pobres del pirineo, pero tenían un gran tesoro, su hermosa hija Culibillas. Ella pasaba gran parte del tiempo con sus amigas, las hormigas blancas que poblaban las laderas de Formigal.
No muy lejos, el poderoso Balaitous era todo lo opuesto a la joven Culibillas: fuerte y violento era temido por todos, nadie podía oponerse a sus deseos. Él amasaba las terribles tormentas del Pirineo y creaba los rayos capaces de destruir todo lo que él quisiera, haciendo estremecerse a los propios cimientos de las montañas.
Pero Balaitous la observaba día y noche con ardiente deseo, hasta tal punto que intentó hacer de Culibillas su esposa. Mas ella, inocente como una niña, le desdeñaba una y otra vez. Entonces, lleno de furia, intentó secuestrar a Culibillas. Se presentó ante ella y todos los demás dioses contemplaban la escena asustados, sin atreverse a intervenir. Pero las hormigas, sus buenas amigas, la protegieron, cubriéndola por completo y ocultándola así de la mirada de Balaitous. Ante esto, él desistió en su intento, pero furioso contra las hormigas aplastó a miles de ellas antes de retirarse, surgiendo así la nieve por primera vez en Formigal.
En agradecimiento, Culibillas atravesó su pecho con un puñal para que se refugiaran en él las hormigas que habían sobrevivido, originándose así el Forato o agujero de la Peña Foratata, donde desaparecieron las hormigas blancas para siempre. Y cuenta la leyenda que el que sube hasta allí puede oir las palpitaciones del corazón de culibillas a través del Forato.
Tras este paroncillo seguimos hasta el Puerto de Portalet, donde dejamos ya el coche. Desde allí pudimos disfrutar de estas vistas del Midi d'Ossau (2884 m.) y del Peyreget (2487 m.) a su izquierda.
Nos pusimos las raquetas y las polainas y nos abrigamos bien (hacía cinco bajo cero).
Y éstas son algunas de las vistas que teníamos antes de echar a andar:
La Pene Mieytadere (2124 m.) y la Campana de Aneou (2267 m.).
El Midi y el Peyreget sobre unos refugios de pastores.
Bajamos hacia los refugios de pastores para remontar el circo de Aneou. Desde aquí se veía perfectamente todo el circo. De izquierda a derecha tenemos: Pene Mieytadere (2124 m.), la Camapana de Aneou (2267 m.), el Aneou (2364 m.) y la Pene de la Glere (2307 m.), bajo la cual nos dirigíamos.
Detrás de nosotros, todo el cordal que se dirige hacia Pallas, Arriel y el poderoso Balaitous, el primer tresmil del pirineo occidental.
Desde la esquina nos controlaba el coloso de Le Lurien (2826 m.), que hace unos meses contemplábamos con una perspectiva muy distinta desde los Lacs d'Ayous.
Por fin en el refugio. El Midi no deja de vigilarnos... o más vien, nosotros a él...
Una mirada atrás...
... alguna foto más, y a seguir por la huella. Es muy curioso, pues la última nevada había caído el martes, dos días antes, y ya estaba todo plagado de caminos en la nieve... Hay gente que en seguida aparece por allí...
Formas curiosas en la nieve creadas por el viento.
El camino andado hasta ahora.
A esa pequeña loma de la derecha donde hay ya algunas personas nos dirigimos.
El sol intenta asomar por detrás del Aneou...
...y los cristales de hielo devuelven su brillo como si fueran diamantes.
Por fin llegamos a nuestro destino. Aquí comeremos.
Lo mismo opinan esos montañeros de en frente.
Desde aquí impresiona más aún la Pene de la Glere.
Si siguiéramos por ahí llegaríamos a la Canal Roya o a Astún.
Alguna foto más en nuestra loma después de comer y pensando ya en bajar, que se hace tarde y se está levantando un viento frío. A partir de la tarde había previsión de que el tiempo empeorara y ya lo empezábamos a notar...
Juan Luis se alejó un poco al sitio donde habían comido los otros montañeros para sacar alguna foto de nuestra loma y otras panorámicas...
De nuevo para abajo. El viento empezaba a levantar la nieve de las cimas. Ya otros habían ocupado nuestra atalaya. La verdad es que para ser jueves vimos a mucha gente...
Las paredes del Midi, bien miradas, son impresionantes... ¡Qué preciosidad!
Bonito sitio para sacar algunas fotos, ya cerca del refugio.
Estas plantas le daban un encanto especial a las fotos...
Para esta no saqué el trípode...
... sino que usé un sistema más precario...
Ya se veían los edificios del Puerto de Portalet. El quitanieves acababa de pasar por la carretera.
El recién nacido Arroyo de Brousset nos dejaba estas bonitas estampas...
Un último vistazo a nuestro recorrido... Las sombras ganan terreno rápidamente, y eso que no son más que las 4 de la tarde...
Ya en la carretera apreciamos que la cumbre del Midi empieza a cubrirse. Ya está aquí el cambio del tiempo anunciado...
De vuelta al puerto. Ha sido un bonito paseo.
Según nos indica el coche aún hace fresquito fuera...
De nuevo la mole del Garmo Negro y Picos del Infierno con la Peña Foratata a la izquierda.
Sallent de Gállego reposa a la sombra de estos colosos...
Y un poco más abajo paramos de nuevo para hacer esta foto de Peña Telera, pues desde aquí se aprecia perfectamente el recorrido que hicimos la otra vez cuando estuvimos en ella. Las nubes ya lo invaden todo...
... y así iban a estar por mucho tiempo.
Esto ha sido todo por esta ocasión. Esperemos que el tiempo mejore algo y podamos hacer otra salida pronto.
Cómo os lo pasáis algunos en la nieve, fíjate que a mí me echa para atrás... De todas maneras, jornada muy bien aprovechada y bellísimas fotos. Ese circo de Aneou está magníficamente situado y ofrece un panorama grandioso rodeado de colosos. Imagino que la Campana de Aneou se podrá subir sin muchos problemas en verano o qué... Y muy bonita le leyenda de Formigal, no la conocía.
ResponderEliminarPermíteme una correción, no más, con lo del Balaitous. El tres mil más occidental es el Frondella. Tendemos a decir que es el Balaitous, pero no es lo correcto. Un saludo Gonzalo.
Siempre que pongo algún dato o nombre lo hago con miedo pensando: "verás como lo lee Mikel y me saca algún fallo"...
ResponderEliminarEs broma, la forma de aprender es corrigiendo. La verdad es que como lo había leído en un libro de rutas ya lo había dado por sentado, pero tienes toda la razón, Frondellas es más occidental.
La nieve a mí también me suele echar bastante para atrás (me cansa mucho y prefiero pisar tierra firme), pero una experiencia de estas de vez en cuando la verdad es que es preciosa.
Bueno, pues nada, nos vemos por Mendiak!